Quiénes somos

Este medio de comunicación, nace en un intento de acercar a todos y cada uno de los ciudadanos -independientemente de su profesión y educación- una información política lo más veraz posible, atendiendo siempre a criterios académicos ampliamente aceptados por la comunidad científico social, y siempre estando abiertos al debate en torno a acepciones y reflexiones que son flexibles y nunca deterministas.

Somos un grupo de politólogos, con vocación en filosofía política, historia del pensamiento, relaciones internacionales, entre otras disciplinas. Pretendemos dar claridad y algo de luz, por medio de nuestros conocimientos, a un debate político que está muy desprestigiado. La información está muy manipulada y tergiversada, los medios de información están a merced de un mercado sin criterio para cribar una información de calidad, y la palabra que rige los debates parlamentarios carece de toda lógica. Por ello, solo a través de información bien argumentada, tratada, analizada y reflexionada pretendemos acercarnos a un sentido común político que le sirva al ciudadano para ir a las urnas electorales siendo un poco más libre en conciencia.

Internet y las tecnologías de la información y la comunicación han revolucionado la política como nunca antes visto. La democracia es un sistema político que está ampliamente aceptado a nivel internacional, o casi, pero que sufre de una enorme deslegitimación al menos en cuanto a su calidad se refiere. La información fluye por las redes y por nuestros teléfonos. Vemos lo que está pasando al otro lado del mundo a tiempo real. Leemos lo que dicen los políticos casi instantáneamente. Damos por sentado cualquier tipo de información que vaya en concordancia con nuestras ideas. Y posteriormente el día de las elecciones depositamos nuestro sobre creyendo que lo hacemos por convicción propia. Cuando en realidad, estamos manipulados.

Alguien se preguntará si informándose a través de este medio podrá votar por convicción propia. Pues nuestra respuesta es que tampoco. Estamos tan influidos por la información que llegar a distinguir lo que es real de lo que no, es casi imposible. Pero desde luego informándose como es debido gozaremos de más libertad de conciencia a la hora de emitir juicios.

Y es que, desde illiberaldemocracy no pretendemos ser un medio más donde existe información política de tipo descriptiva, como se pudiera encontrar en cualquier tipo de enciclopedia digital o incluso con la nueva inteligencia artificial. Creemos que la información hay que tratarla, analizarla, reflexionarla y después debatirla. Nuestros artículos se basan más en la reflexión que en la descripción. Animamos a todos nuestros lectores a contrastar la información en otros medios. Porque en el mundo de las Ciencias Sociales la verdad única y verdadera no existe, pero nos podemos acercar a ella a través de la palabra y el sentido común, y por ello, la comparación es una herramienta indispensable. Porque si queremos hacer algo por la democracia de la que hoy gozamos -al menos en una parte del mundo- es necesario debatir con argumentos lógicos como condición previa antes de acudir a las urnas. Y sin información veraz y crítica, este tipo de régimen político está condenado al fracaso.

Porque nuestras democracias liberales no deben convertirse en iliberales, es decir, un régimen que atenta no solo contra los principios liberales, sino también, contra el sentido más esencial de la democracia. Esto es, el poder libre de un pueblo libre.